LOS BENEFICIOS DEL SUTRA DEL LOTO. LA INICIATIVA PERSONAL ES EL ESPÍRITU FUNDACIONAL DE LA SOKA GAKKAI. Por Daisaku Ikeda.
Pero yo soy diferente de esas personas.
Mantengo con firmeza la enseñanza de que el Sutra del loto es supremo entre
todos los sutras que el Buda ha predicado, predica y predicará (1). Además,
invoco el daimoku (2), que es el corazón y la esencia de todo el sutra, y
exhorto a otros a hacer lo mismo. La artemisa que crece en la plantación de
cáñamo o la madera marcada con una línea de corte tal vez no sean del todo
derechas al comienzo, pero luego se enderezarán sin falta.
De la misma manera, quien invoco el daimoku
como enseña el Sutra del loto jamás tendrá una mente distorsionada. Pues debe
saberse que, en rigor, no es posible invocar el daimoku a menos que la mente
del Buda entre en nuestro cuerpo.
PRACTICAR BASADOS EN EL SUTRA DEL LOTO
¿Cómo hizo el Daishonin para ser la primera
persona en reconocer la época y comenzar a propagar el daimoku del Sutra del
Loto por propia voluntad en el Último Día? En este pasaje brinda la respuesta,
recalcando la importancia de practicar fielmente tal como enseña el Buda.
Nichiren ejemplificó
este compromiso con sus propias acciones, siempre basándose en el Sutra del
Loto, y no en las interpretaciones de los diversos maestros y académicos
budistas.
En cambio, los
fundadores de las distintas escuelas budistas —excepto los grandes maestros
T’ien-t’ai y Dengyo, quienes practicaron el Sutra del Loto—, todos se habían
apartado del verdadero espíritu del Sutra del Loto, pues habían leído su texto
literalmente, pero basados en los sutras particulares en los cuales se apoyaban
sus doctrinas o sus maestros. Como intentaron comprender el Sutra del loto
desde el punto de vista de las enseñanzas previas, no pudieron comprender la
esencia del Sutra del loto como enseñanza para la iluminación universal,
fundamentada en las doctrinas de la «posesión mutua de los diez estados» (3) y
de los «tres mil estados contenidos en cada instante vital».(4) Por esa razón,
era como si no hubieran leído el Sutra del loto en absoluto.
El Daishonin escribe,
señalando que él es diferente de los fundadores de otras escuelas budistas:
«Mantengo con firmeza la enseñanza de que el Sutra del Loto es supremo entre
todos los sutras que el Buda ha predicado, predica y predicará» (END, pág.
705). Indica que él ha estado invocando Nam-myoho-renge-kyo por sí mismo y
enseñando a otros a hacer lo mismo, exactamente de acuerdo con el Sutra del
Loto, que abarca la esencia de las enseñanzas expuestas por el Buda durante
toda su vida.
De esta forma, el
Daishonin enfatiza sobre la importancia de tener fe y actuar en base a las
enseñanzas del Sutra del loto. Así como los tallos retorcidos de la artemisa
crecen derechos en una plantación de cáñamo o como la madera se corta derecha
cuando se la marca con una línea de corte, cuando entonamos el daimoku «tal
como enseña el Sutra del loto», nuestra mente no distorsionará ni retorcerá la
verdadera intención del buda Shakyamuni. (END, pág. 704). El Daishonin, además,
afirma: «Pues debe saberse que, en rigor, no es posible entonar el daimoku a
menos que la mente del Buda entre en nuestro cuerpo» (END, pág. 704). Este es un
pasaje de extrema importancia.
En el capítulo “Medios
hábiles” (2°) del Sutra del Loto, encontramos las palabras “descartar
honestamente los medios hábiles” (El Sutra del loto y sus sutras de de Inicio y
de Cierre, cap. 16, pág. 271; Sutra del loto, cap. 16, pág. 230)(5). El Sutra
del loto es una enseñanza en la cual el buda Shakyamuni descartó sinceramente
los medios preparatorios y predicó en forma directa el verdadero camino hacia
el logro de la Budeidad. Y en el capítulo “Duración de la vida” (16°) del Sutra
del Loto, leemos: «Cuando los seres han llegado a ser verdaderamente fieles,
honestos y rectos, de bondadosa intención, con el único pensamiento puro y
sincero de ver al Buda sin vacilar aunque ello les costara la vida» (LSOC,
271).(6) En consecuencia, aun en el Último Día de la Ley, la «mente del Buda»
(END, págs.703-4) solo se activa en la vida de aquellos que creen en el Sutra
del loto, han descartado su apego a ideas arbitrarias y sabiduría errónea, han
aceptado con sinceridad y buena voluntad la enseñanza del Buda y han buscado al
Buda con un solo pensamiento puro y sincero, y sin escatimar su devoción.
El Daishonin aceptó plenamente y sin reservas el Sutra del loto,
que directamente elucida el corazón y la intención del Buda. Como resultado de
ello, por sí mismo comprendió el significado de la enseñanza de los cinco
caracteres de Myoho-renge-kyo, y el significado de la época del Último Día como
el momento en que debía propagarse ampliamente la Ley Mística. Fue la misma
clase de reconocimiento que el bodhisattva Prácticas Superiores había tenido
cuando escuchó la «la maravillosa enseñanza predicada por la boca de oro del
buda Shakyamuni» (END, pág. 703) durante la Ceremonia en el Aire,(7) y cuando
se le confió la misión de propagar esta enseñanza en la época perversa después
de la muerte del Buda.
El Sutra del Loto
advierte que aquellos que practican exactamente como él enseña invariablemente
tendrán que enfrentar grandes obstáculos y persecuciones. El capítulo “Maestro
de la Ley” (10°) explica: «Puesto que el odio y los celos hacia este sutra
abundan incluso durante la vida de El Que Así Llega, ¡cuánto peor será después
de su muerte» (LSOC, 203). El capítulo “Prácticas pacíficas” (14°) afirma:
«Este Sutra del loto [...] provocará mucha hostilidad en el mundo, y será
difícil creer en él» (LSOC, 246). Y el capítulo “Aliento a la devoción” (13°)
describe en detalle los «tres enemigos poderosos»,(8) que atacarán a los
practicantes del Sutra del loto en el Último Día (LSOC, 232-34).
Nichiren Daishonin
experimentó dificultades y persecuciones tal como describe el sutra,
demostrando así la verdad de la enseñanza de Shakyamuni. En tal sentido,
escribe: «Si yo, Nichiren, no hubiese nacido en la tierra del Japón, dichos
pasajes habrían sido meras palabras del Buda, vacías de todo significado» (END,
pág. 705).
Es la Soka Gakkai la que
ha mantenido el linaje directo de Nichiren Daishonin y la que ha demostrado la
validez de sus enseñanzas. En las últimas ocho décadas desde su fundación, la
Soka Gakkai ha luchado incesantemente y ha triunfado mediante la fe,
directamente conectada al Daishonin y basada en sus escritos.
Como resultado de esta
labor, hemos podido compartir la enseñanza correcta de Nichiren Daishonin con
todos los pueblos del mundo.
El señor Makiguchi
estaba decidido a no dejar que el Budismo de Nichiren Daishonin permaneciera
enterrado como una religión formal, que sólo se tenía presente a la hora de
hacer funerales o ceremonias en los templos. Esta situación era producto del
sistema parroquial obligatorio o danka,(9) que se había implantado en el Japón
alrededor del siglo XVII. Juró poner las enseñanzas del Daishonin al alcance de
la gente común en todo el mundo, volviendo al espíritu original del Buda
original. No sólo revitalizó el budismo como filosofía práctica para construir
una vida creadora de valor, sino que además revivió la práctica budista con
miras a lograr el kosen-rufu, recalcando la importancia de dar prueba real y de
mostrar el poder benéfico de la fe en la Ley Mística. Es más, el propio señor
Makiguchi practicó el budismo del Daishonin con una actitud sumamente severa
hacia los actos contra la Ley. Cuando el clero de la Nichiren Shoshu exigió que
los miembros de la Soka Gak-kai aceptaran el talismán sintoísta obedeciendo las
órdenes del gobierno militarista del Japón, el presidente Makiguchi se negó
tajantemente. Su postura digna y resuelta fue la de un auténtico heredero de la
fe correcta en el Budismo de Nichiren Daishonin.
El señor Toda también
grabó en su vida los escritos del Daishonin. Juró lograr el kosen-rufu,
consciente de su misión como Bodhisattva de la Tierra, y trabajó
infatigablemente para guiar a todo el pueblo hacia la felicidad genuina.
Como discípulo del señor
Toda, yo también asumí la responsabilidad total del kosen-rufu, trabajando
junto a mis sinceros y nobles compañeros de fe en todo el Japón y en el mundo.
Hemos y aún seguimos luchando, contra los tres obstáculos y cuatro demonios,
(10) incluyendo las funciones insidiosas del Rey Demonio del Sexto Cielo,(11) y
hemos triunfado sobre los tres enemigos poderosos en todos los frentes.
Somos los miembros de la
Soka Gakkai los que estamos viviendo los escritos de Nichiren Daishonin y
demostrando su relevancia y su vitalidad en la época actual. Nuestra
organización es la única que ha heredado el verdadero espíritu del Budismo de
Nichiren Daishonin y ha llevado a cabo fielmente la voluntad del Buda. Nuestros
ochenta años de historia —una historia de práctica sin escatimar la vida y
siempre de acuerdo con las enseñanzas del Buda— testimonian inequívocamente la
legitimidad de la Soka Gakkai como organización del kosen-rufu.
NOTAS:
1. El capítulo “Maestro de la Ley” (10°) del Sutra del loto
Shakyamuni explica: «Los sutras que prediqué suman infinidad de miles, decenas
de miles, millones. De todos los sutras que he predicado, predico y predicaré,
este Sutra del Loto es lo más difícil de creer y lo más difícil de comprender».
Véase El Sutra del Loto y sus sutras de inicio y de cierre, cap. 10, pág. 203;
Sutra del loto, cap. 10, pág. 164. Esto significa que, comparado con todos los
demás sutras, es decir, los sutras predicados antes y después del Sutra del
loto, incluidos el Sutra de los infinitos significados y el Sutra del nirvana,
el Sutra del loto es la enseñanza suprema y es el más difícil de creer y de
comprender.
2. Daimoku: Título del Sutra del Loto. Invocación de
Nam-myoho-renge-kyo en las enseñanzas de Nichiren Daishonin.
3. Posesión mutua de los diez estados: Principio según el cual
cada uno de los diez estados posee el potencial de los diez en sí mismo.
«Posesión mutua» quiere decir que la vida no se encuentra fija en un estado
específico, dentro de los diez estados, sino que puede manifestar cualquiera de
ellos, desde el infierno hasta la Budeidad, en cualquier momento dado. Lo
importante de este principio es que todos los seres, en cualquiera de los nueve
estados, poseen la naturaleza de Buda. Cada persona, entonces, tiene el
potencial de manifestar la Budeidad, mientras que un Buda también posee los
nueve estados y, en tal sentido, no es un ser separado o distinto de la gente
común.
4. Tres mil estados contenidos en cada instante vital: Doctrina
desarrollada por el gran maestro T'ien-t'ai de la China que se basa en el Sutra
del loto. Principio según el cual todos los fenómenos están contenidos en cada
instante vital, y que cada instante vital impregna los tres mil estados de la
existencia; es decir, la totalidad del mundo fenoménico.
5. En el Sutra del Loto, Shakyamuni dice: «Ahora yo, jubiloso e
intrépido, en medio de los bodhisattvas, descartando honestamente los medios
hábiles, predicaré sólo el Camino insuperable». El “Sutra del Loto” y sus
sutras de inicio y de cierre, op. cit., cap. 2, pág. 79; Sutra del loto, cap.
2, págs. 44-45. Con estas palabras, indica que los sutras que ha predicado
antes de esa época eran sólo medios hábiles y enseñanzas provisionales.
6. Este pasaje significa que Shakyamuni aparecerá allí donde hay
personas que realmente creen en la Ley Mística, tienen sincero espíritu de
búsqueda y se consagran a su práctica budista sin escatimar la vida. El Sutra
del loto y sus sutras de inicio y de cierre, cap. 16, pág. 271; Sutra del loto,
cap. 16, pág. 230.
7. Ceremonia en el Aire: Una de las tres asambleas descritas en
el Sutra del loto, en la cual toda la congregación de personas queda suspendida
en el espacio por sobre el mundo saha. Va desde el capítulo 13° 11°, “La Torre
de los Tesoros”, hasta el 22°, “La transferencia”. El corazón de esta ceremonia
es revelar la iluminación original del Buda en el remoto pasado y la
transmisión de la esencia del sutra a los Bodhisattvas de la Tierra, guiados
por el bodhisattva Prácticas Superiores.
8. Tres enemigos poderosos: Tres clases de personas arrogantes
que persiguen a los que propagan el Sutra del loto en la época malvada
posterior a la muerte del Buda. Se los describe en la estrofa de veinte versos
del capítulo ‘Aliento a la devoción” (13°) del Sutra del loto. El gran maestro
Miao-lo de la China los tipificó en tres categorías: 1) laicos arrogantes; 2)
sacerdotes arrogantes; 3) falsos venerables arrogantes.
9. Según establecía este sistema, instaurado por el gobierno
militar de Tokugawa a mediados del siglo xvii como parte de sus medidas para
erradicar el cristianismo en el Japón, los templos budistas quedaron adscriptos
a la burocracia gubernamental y se les confirió autoridad administrativa sobre
los danka o familias de feligreses que vivían en la jurisdicción territorial
asignada a cada templo. Todas las familias, obligatoriamente, debían
registrarse en un templo. Esto dio al budismo un carácter cada vez más formal y
alejado de su espíritu religioso. Literalmente, dan significa «donación», y ka,
«familia». Danka son las familias que hacen donaciones para mantener
económicamente los templos. Danto son los miembros individuales de cada danka.
10. Tres obstáculos y cuatro demonios: Diversas obstrucciones e
impedimentos que se interponen en la práctica budista de los creyentes.
Los tres obstáculos son:
1) el obstáculo de los deseos mundanos.
2) el obstáculo del karma.
3) el obstáculo de la retribución.
Los cuatro demonios son:
1) el impedimento de los cinco componentes.
2) el impedimento de los deseos mundanos.
3) el impedimento de la muerte.
4) el impedimento del Rey Demonio.
11. Rey Demonio del Sexto Cielo: También conocido como Rey
Demonio o demonio celestial. Soberano de las funciones demoníacas, que habita
en el sexto cielo del mundo del deseo, el más alto de todos. También se lo
llama «El Que Goza Manipulando a Su Voluntad el Producto de las Cosas
Conjuradas por Otros», el rey que utiliza a su placer el fruto del esfuerzo
ajeno. Asistido por incontables funciones subsidiarias, obstruye la práctica
budista y disfruta consumiendo la vitalidad de otros seres. Este Rey Demonio
personifica la tendencia negativa a imponer la propia voluntad sobre los demás
a cualquier costo.