La vida del Buda
histórico aparece en diferentes fragmentos de la literatura budista.
En su primera versión no
aparece en ningún texto, pero se la puede reconstruir de versiones registradas en
el Sutra pali (sánscrito. Sutra) y en la literatura vinaya de la tradición
teravada (2).
Los textos posteriores
de las tradiciones mahasánguika, sarvastivada y mahayana, embellecen estas
sencillas descripciones de los primeros textos con muchas características. La
estampa original que surge de la literatura pali, revela una persona muy humana
quien, al vivir en tiempos problemáticos e inseguros, enfrentó numerosas
dificultades y desafíos, tanto personales como en su comunidad monástica.
Esta primera versión de
la vida del Buda, utiliza todos los nombres en su versión
pali.
El Buda nació en el 566 a.e.c. (3) en el Parque
Lumbini (Lumbi-na’i tshal), lo que actualmente es la parte sur de Nepal. Este
parque se encuentra no muy lejos de Kapilavatthu (Ser-skya’i gnas, sáncrito
Kapilavastu), la capital de Sakiya (Sha-kya, sánscrito Shakya).
El padre de Siddhartha,
Shuddhodana (Zas tsang-ma, sánscrito Shuddhodana), fue un noble del clan
Gautama, quien probablemente sirvió como gobernador regional en Sakiya. El
canon pali no registra el nombre de la madre del Buda, pero fuentes sánscritas
posteriores la identifican como Maya-devi (Lha-mo sGyu-‘phrul-ma).
La madre de Siddhartha
murió poco después de su nacimiento, por lo que él fue criado por su tía
Pajapati (sKye-dgu’i bdag-mo chen-mo, sánscrito Mahaprajapati), con quien su
padre se casó como era la costumbre de la época.
Sakiya era una república
antigua, pero en la época en que Siddhartha nació, formaba parte del poderoso
reino de Kosala (Ko-sa-la, sáncrito Koshala). Kosala se extendía desde la
ribera norte del río Ganges, actualmente Bihar, hasta la base de los Himalayas.
Su capital era Savatthi (gNyan-yod, sáncrito Shravasti).
BREVE DESCRIPCIÓN DE LA GEOGRAFÍA DE LOS LUGARES DONDE VIVIÓ EL
BUDA SHAKYAMUNI.
Sakiya se localiza en la
parte oriental de Kosala, colindante con la provincia de Malla (Gyad-kyi yul,
sáncrito Malla) por el sur. Al oriente de Malla estaba la república de Vajji
(sáncrito Vrji), cuya capital era Vesali (Yangs-pa-can, sánscrito Vaishali). La
república Vajji era regida por una confederación de clanes, de los cuales el
licchavi (Li-ccha-bi, sánscrito Licchavi) era el más famoso. Al sur de Vajji y
Kosala, al otro lado del río Ganges, se encontraba el poderoso reino de Magadha
(Yul Ma-ga-dha, sánscrito Magadha), cuya capital era Rajagaha (rGyal-po’i khab,
sáncrito Rajagrha). Al oeste de Kosala estaba Gandhara (Sa-‘dzin, sánscrito
Ghandhara), actualmente Pakistán, que fue una provincia (satrapía)(4) del
imperio persa aqueménida; en su capital Takkasila (rDo-‘jog, sánscrito
Takshashila) estaba la universidad más famosa de la época. Allí las ideas
griegas y persas se mezclaban con sus contrapartes indias contemporáneas.
Kapilavatthu, donde
creció Siddhartha, era una gran ciudad del camino norte, la principal vía
comercial de la época. El camino norte unía a Kosala con Gandhara en el oeste y
pasaba a través de Sakiya, Malla y la república de Vajji, hacia Gandara por el
sur.
SU VIDA
Aunque el canon pali
describe poco de la vida de Siddhartha antes de los 29 años, observamos que fue
influenciado por diversas culturas. Es probable incluso que haya estudiado en
Takkasila, aunque esto no puede asegurarse.
Siddhartha se casó con Bhaddakaccana, a quien se conoce en la
literatura sánscrita como Yashodhara (Grags ‘dzin-ma). Ella era la prima de
Siddhartha y la hermana de Devadatta (Lhas-byin, sáncrito Devadatta) quien
posteriormente sería la principal oponente del Buda.
Con ella tuvieron un
hijo llamado Rahula (sGra-gcan ‘dzin, sct. Rahula). Poco después del nacimiento
de su hijo, el Buda dejó Kapilavatthu a la edad de 29 años y se dirigió a
Magadha en busca de la verdad espiritual.
Viajó a lo largo del
camino norte y cruzó el río Ganges para llegar a Rajagaha. En ese tiempo
Magadha era regido por el rey Bimbisara (gZugs-can snying-po) y Kosala por el
rey Pasenadi (rGyal-po gSal-rgyal, sánscrito. Prasenajit).
Como parte de una
alianza entre Kosala y Magadha, los reyes se habían casado con la hermana de
cada uno. La hermana del rey Pasenadi se llamaba Devi (Lha-mo, sct. Devi).
En Magadha, Siddhartha
estudió en las comunidades de dos profesores: Alara Kalama (sánscrito. Arada
Kalama) y Uddaka Ramaputta (sánscrito. Udraka Ramaputra). Como venían de la
tradición brahmánica le enseñaron cómo lograr la concentración absorto en nada
en absoluto y la concentración absorta en ni distinguir ni no distinguir.
Sin embargo, Siddhartha
no estaba satisfecho con estos logros, por lo que dejó a estos profesores.
Luego se sometió a un régimen de extrema austeridad, sin comer casi nada.
Nuevamente sintió que esa práctica no lo llevaría a la liberación. Terminó su
ayuno y viajó a Uruvela ((lDeng-rgyas, sct. Urubilv), actualmente Bodhgaya,
donde obtuvo la iluminación bajo el árbol bodhi a la edad de treinta y cinco
años; seis años después de llegar a Magadha.
Después de obtener la
iluminación, fue al oeste hacia Migadaya (Ri-dvags-kyi gnas, sct. Mrgadava), al
Parque de los Venados en Isapatana (Drang-srong lhung-ba, sct. Rshipatana),
actualmente Sarnath, a las afueras de Varanasi. Aunque era al norte del río
Ganges, el rey Pasenadi había cedido esta área a Magadha como parte de la dote
que dio por su hermana Devi cuando se casó con el rey Bimbisara. El Buda pasó
la estación lluviosa en el Parque de los Venados con sus cinco compañeros y
pronto atrajo a un pequeño número de seguidores que formaron una comunidad
célibe, de la cual se hizo cargo.
Mahali, un noble
licchavi de Vesali, se enteró del Buda y le sugirió al rey Bimbisara que lo
invitara a Magadha.
Después del monzón, el
Buda y su creciente comunidad retornaron al este hacia Rajagaha, la capital de
Magadha. El rey Bimbisara estaba impresionado con las enseñanzas del Buda y le
ofreció un parque abandonado llamado “Veluvana” (‘ Od-ma’i tshal, sáncrito.
Venuvana), el “Bosque de Bambú”, en donde podría establecer su comunidad
durante la temporada de lluvias.
Pronto se unieron a la
comunidad del Buda Shariputra (Sha-ri’i bu, sánscrito. Shariputra) y Moggallana
(Mo’u dgal-gyi bu, sáncrito. Maudgalyayana) los principales discípulos de un
gurú local, quienes se volvieron los discípulos más cercanos del Buda.
Shariputra le solicito
al Buda que formulara los votos para la creciente comunidad monástica y el rey
Bimbisara sugirió que adoptaran algunas de las costumbres de los grupos
espirituales mendicantes, tales como los jainistas. Específicamente, el rey
recomendó que sostuvieran reuniones trimestrales para discutir las enseñanzas,
a lo que el Buda accedió.
Un día, Anathapindika
(dGon-med zas-sbyin, sct. Anathapindada) un próspero banquero de Savatti, la
capital de Kosala, vino por negocios a Rajagaha. Impresionado por el Buda, le
ofreció un lugar para pasar la estación lluviosa en Savatthi, la capital del
rey Pasenadi. Poco después, el Buda y su comunidad de monjes se trasladaron a
Kosala; pero pasarían muchos años antes de que Anathapindika les ofreciera un
lugar adecuado para permanecer.
Mientras tanto, el Buda
viajó a visitar a su familia en Kapilavatthu. Su padre, Suddhodana, pronto se
volvió uno de sus seguidores, y Rahula, su hijo de ocho años, se unió a la
orden monástica como novicio. En los años siguientes, muchos nobles sakiyan se
unieron; incluyendo a sus primos Ananda (Kun dga’-bo, sánscrito. Ananda),
Anuruddha (Ma-‘gag-pa, sánscrito. Anuruddha) y Devadatta, así como el
hermanastro, Nanda (dGa’-bo, sánscrito. Nanda). También conocido como
“Sundarananda” (mDzes-dga’, sánscrito. Sundarinanda), o “Nanda el hermoso”.
Nanda se había casado
con la esposa del Buda después de que éste dejó el palacio para iniciar su
viaje espiritual.
La tía y madrastra del
Buda, Pajapati, le solicitó ingresar a la creciente comunidad, pero
inicialmente el Buda se negó. Sin desanimarse, ella se rasuró la cabeza, vistió
los hábitos amarillos y, acompañada de un gran grupo de mujeres, siguió al Buda
a donde quiera que fuera.
Pajapati, continuó pidiéndole la ordenación al Buda pero él se la
negó por segunda y tercera vez. Finalmente, pocos años antes de morir, Ananda
intercedió por ella ante el Buda y finalmente el Buda aceptó ordenarla. Esto
ocurrió en Vesali, en la república Vajji, y fue
el inicio de las órdenes de monjas en el budismo.
Anathapindika fue famoso
por su gran generosidad y pocos años después de que el Buda regresó a Kosala,
pagó una gran cantidad de oro para comprar un parque en Savatthi llamado
“Jetavana” (rGyal-byed-kyi tshal, sánscrito. Jetavana) el “Bosque de Jeta”.
Aquí construyó una lujosa residencia para que el Buda y sus monjes pasaran la
estación lluviosa.
Alrededor de veinte años
después de su iluminación, el Buda institucionalizó la costumbre del retiro
formal de la estación de lluvias (dbyar-gnas, sánscrito, varshaka) para su
comunidad monástica, durante el cual los monásticos permanecerían en un solo
lugar durante los tres meses del monzón cada año y no deambulaban de un lugar a
otro como lo hacían el resto del año.
En total, el Buda pasó
diecinueve retiros de la estación de lluvias en el “Bosque de Jeta”, durante
los cuales enseñó 844 de sus discursos. Anathapindika fue un gran benefactor de
la comunidad monástica del Buda, aunque cerca del final de su vida terminó en
bancarrota.
El rey Pasenadi de
Kosala, conoció al Buda en el “Bosque de Jeta”, cuando el Buda tenía alrededor
de cuarenta años. El Buda impresionó gratamente al rey quien posteriormente se
volvió uno de sus seguidores y benefactores. Sin embargo, la relación del Buda
con el rey Pasenadi siempre fue muy delicada. Aunque el rey era un asiduo
participante de las enseñanzas, fue también un sensualista (5), y a menudo muy
cruel. Por ejemplo, en un ataque de paranoia asesinó a Bandhula, su amigo de
Malla y comandante de su ejército; por remordimiento nombró a Karayana, sobrino
de Bandhula, como cabeza del ejército.
Años más tarde, el
general Karayana derrocó al rey Pasenadi como revancha por la muerte de su
padre. El Buda, sin embargo, toleró las erráticas formas y cambiantes fortunas
del rey, indudablemente porque necesitaba protección de los ladrones y los
animales salvajes para su comunidad, así como acceso a benefactores generosos
que lo apoyaran.
Para asegurar la
sucesión de su dinastía, el rey Pasenadi necesitaba tener un hijo. Su primera
esposa, la hermana del rey Bimbisara de Magadha, aparentemente no le dio hijos.
El rey desposó entonces a Mallika (Ma-li-ka, sánscrito. Mallika) como segunda
esposa, una hermosa seguidora del Buda de casta inferior. Los sacerdotes
brahamínes de la corte real estaban escandalizados por el nacimiento inferior
de la mujer. Mallika le dio al rey Pasenadi una hija, Vajiri (rDo-rje-ma, sánscrito.
Vajri).
El rey sintió entonces
la necesidad de tomar una tercera esposa que le diera un hijo. Así que se casó
con Vasabha, la hija del primo del Buda, Mahanama (Ming-chen, sánscrito.
Mahanama), quien se había vuelto el gobernador de Sakiya después de la muerte
del padre del Buda.
Mahanama era el hermano
de Ananda y Anuruddha, los discípulos más cercanos del Buda. Aunque Mahanama
hizo pasar a Vasabha como de la nobleza, en realidad era hija ilegítima de una
mujer esclava.
Aunque Vasabha le dio al
rey Pasenadi un hijo, Vidadabha, su posición como heredero del trono de Kosala fue
precaria, debido a la latente decepción por el linaje de la madre. Esta
decepción también puso al Buda en una situación difícil, por su relación con
Vasabha. Sin saber de su condición de ilegítimo, Vidadabha visitó a Sakiya y a
su abuelo Mahanama por primera vez a la edad de dieciséis años. Mientras estaba
allí, Karayana, el comandante del ejército de Pasenadi, conoció los verdaderos
antecedentes de la madre de Vidadabha. Cuando el comandante del ejército le
contó a Pasenadi que su hijo era el nieto ilegítimo de una esclava, el rey
montó en cólera en contra de los sakiyanis. Despojó a su esposa e hijo de la
posición real y los volvió esclavos.
El Buda intercedió por
ellos y finalmente el rey les restauró su posición.
Sin embargo, después de
esto, la posición del Buda en Kosala se volvió insegura y, alrededor de los
setenta años, regresó por primera vez a Rajagaha y su capital Magadha. Allí, se
hospedó en el Bosque de Mango que pertenecía a Jivaka (‘ Tsho-byed, sánscrito.
Jivaka), el médico de la corte, en lugar de en el Bosque de Bambú del rey.
Esto indica que quizás
el Buda ya estaba enfermo en ese momento.
Cuando el Buda tenía
setenta y dos años, su primer benefactor, el rey Bimbisara de Magadha, fue
forzado a abdicar en favor de su hijo Ajatasattu (Ma-skyes dgra, sánscrito.
Ajatashatru). Ajatasattu envió a su padre a prisión y lo dejó morir de hambre.
Devi, la viuda de Bimbisara y hermana del rey Pasenadi, murió de tristeza.
Para vengar su muerte,
Pasenadi declaró la guerra a su sobrino Ajatasattu, para recuperar los pueblos
alrededor de Varanasi al norte del Ganges, que él había cedido a Bimbisara como
parte de la dote de Devi. La guerra no concluía y para asegurar la paz,
Pasenadi fue obligado a dar en matrimonio a Ajatasattu a su hija Vajiri.
En la misma época,
Devadatta, el primo del Buda, quien era el maestro de Ajatasattu, trató de
controlar la orden monástica del Buda. Devadatta intentó convencer al Buda para
imponer algunas reglas de disciplina adicionales para los monjes, tales como el
tener que vivir en los bosques, dormir sólo bajo los árboles, no entrar en la
casa de los laicos, vestir sólo harapos, no aceptar ropa regalada de los laicos
y ser vegetarianos estrictos.
El Buda se negó, porque
creyó que esto haría a su orden muy ascética y la alejaría de la sociedad.
Devadatta desafió la autoridad del Buda y atrajo a muchos de los monjes jóvenes
con sus ideas, creando un cisma al formar su propia comunidad monástica rival.
De hecho, Devadatta
intentó asesinar al Buda en forma repetida e infructuosa. Al final, Shariputra
y Moggallana persuadieron a los monjes para que regresaran a la comunidad del
Buda.
Parece que Devadatta se
arrepintió de sus acciones, pero murió antes de poder pedirle perdón al Buda.
No obstante, el Buda
nunca albergó rencor hacia él ni le deseó el mal.
El rey Ajatasattu
también se arrepintió de haber matado a su padre y, por consejo de Jivaka, el
médico real, admitió su parricidio ante el Buda y pidió perdón.
Un año más tarde, el
Buda viajó una vez más a Sakiya, su tierra natal. Durante la visita del rey
Pasenadi para presentar sus respectos al Buda, el general Karayana hizo un
golpe de estado y colocó al príncipe Vidadabha en el trono de Kosala. El
depuesto rey Pasenadi, sin tener un sitio a donde ir, huyó a Magadha a buscar
la protección de su yerno y sobrino, el rey Ajatasattu en Rajagaha. Sin
embargo, a Pasenadi se le negó la entrada en la ciudad y fue encontrado muerto
al día siguiente.
Mientras tanto, el nuevo
rey de Kosala, Vidudabha, declaró una guerra contra Sakiya en venganza por el
engaño de su abuelo Mahanama acerca de su linaje. Mahanama, como se recordará,
era el primo del Buda y el gobernador de Sakiya. Aunque el Buda intentó en tres
ocasiones convencer al rey de no atacar, en última instancia sus esfuerzos
fueron infructuosos. El ejército de Kosala tenía la orden de masacrar a todos
los habitantes de la capital de Sakiya, Kapilavatthu. Incapaz de evitar la
masacre, el Buda escapó a Rajagaha en Magadha, en busca de la protección del
rey Ajatasattu, como lo había hecho sin éxito, antes que él, Pasenadi.
El camino a Magadha
pasaba a través de la república de Vajji, donde Shariputra, el discípulo más
cercano del Buda, lo estaba esperando en Vesali, su capital. Allí, uno de los
antiguos asistentes del Buda, Sunakkatta (Legs-pa’i rgyu-skar, sánscrito.
Sunakshatra), un noble de Vesali que previamente había dejado los hábitos y la
comunidad budista, desacreditó al Buda ante el parlamento de Vajji. Les dijo
que el Buda no tenía ningún poder sobrehumano, que enseñó de acuerdo a la
lógica cómo detener el apego, pero no cómo obtener estados trascendentales.
El Buda tomó esto como
un cumplido. Sin embargo, esta denuncia, aunada probablemente a la fundación de
la orden de monjas en aquel tiempo, causaron que el Buda perdiera el apoyo y la
buena posición en Vajji.
Posteriormente, el Buda
cruzó el Ganges y siguió hacia Rajagaha, donde permaneció en las cuevas del
Pico del Buitre cerca de Gijjhakuta (Bya-rgod-kyi phung-po, sct. Grdhrakuta).
Vassakara, primer
ministro del rey Ajatasattu, fue a visitar al Buda. Le informó que Ajatasattu
planeaba expandir su reino e invadir la República de Vajji. Aunque el Buda le
aconsejó que los vajjians no podrían ganar por la fuerza y que mantuvieran sus
tradicionales y honorables costumbres, no pudo impedir el inicio de la guerra,
como pasó con la invasión de Kosala a Sakiya. En dicha época sus discípulos más
cercanos, Shariputra y Moggallana, murieron.
El anciano Shariputra
murió de una enfermedad y Moggallana fue muerto a golpes por bandidos mientras
se encontraba en un retiro solitario.
Sin apoyo y simpatía en
Magadha, el Buda decidió regresar al norte una vez más, hacia su país Sakiya,
tal vez para ver lo que había quedado después del ataque de Kosala. Antes de
salir, el Buda le pidió a Ananda que
reuniera a todos los monjes en el Pico del Buitre, donde iba a entregar un
último consejo. Allí, los instruyó para construir la comunidad monástica de
acuerdo con el sistema democrático del parlamento de Vajjian. Debían
celebrar asambleas regulares, vivir en armonía, compartir sus limosnas y
respetar a los mayores.
El Buda pronto abandonó el Pico del Buitre y Magadha, y al llegar
a Vesali en la república de Vajji, paró para hacer el retiro de la temporada de
lluvias. Encontró a una sociedad en decadencia a pesar de la inminente amenaza
de guerra.
Después de perder el
apoyo del parlamento de Vajji, el Buda pasó el monzón solo y le pidió a los
monjes que buscaran refugio entre sus amigos y benefactores.
Durante el curso de las
lluvias del monzón, el Buda de ochenta y un años, enfermó y estuvo a punto de
morir.
Ananda le pidió un
último consejo para los monjes. El Buda les dijo que les había enseñado todo lo
que sabía y que, en el futuro, las enseñanzas debían ser su primer refugio y
fuente de dirección. Para obtener la
liberación del sufrimiento, debían integrar las enseñanzas en sí mismos y no
depender de un líder o comunidad que los salvara, anunciándoles también que
pronto iba a morir.
Con sus discípulos y
primos, Ananda y Anuruddha, el Buda salió una vez más después de las lluvias.
En el camino a Sakiya, se detuvo en Pava, una de las dos principales ciudades
de Malla. Allí en la fiesta se sirvió carne de cerdo envenenada por un herrero
llamado Chunda (Tsu-nda, sct. Cunda). Ante la sospecha de algo malo, el Buda
les pidió a sus primos que no comieran el cerdo; en lugar de ello, se lo comió
él y les pidió que enterraran el resto.
Malla era la patria del
general Karayana, quien dirigió la matanza de Sakiya, y es muy posible que el
veneno estuviera destinado para Ananda, quien era famoso por haber memorizado
todas las enseñanzas del Buda. Si Ananda fuera asesinado, las enseñanzas y la
comunidad del Buda no perdurarían.
Al sufrir el Buda una diarrea hemorrágica aguda, le pidió a
Ananda que lo llevara cerca de Kusinara (Ku-sha’i grong-khyer,
gNas-rtsva-mchog, sánscrito. Kushinagara). Allí, en una cama tendida entre dos
árboles (hamaca), les preguntó a los pocos monjes que estaban con él si tenían
más preguntas o dudas. Abrumados por el dolor, Ananda y los otros monjes
permanecieron en silencio.
El Buda murió a la edad de 81 años, en el AÑO 485 a.e.c.
Antes de que los restos
del Buda fueran incinerados, llegó un grupo de monjes de Pava. Estaban
encabezados por Mahakassapa (‘ Od-srung chen-po, sáscrito. Mahakashyapa), quien
insistió en que esperaran para cremarlo hasta que ellos le presentaran sus
últimos respetos. Mahakassapa era un brahmán de Magadha, que se había
convertido en monje en su vejez, unos pocos años antes.
Cuando el Buda lo
conoció, le dio su viejo y desgastado hábito a cambio del hábito nuevo del
brahmán.
Posteriormente este
hábito del Buda se utilizó para representar la transmisión de la autoridad y el
inicio del linaje de los patriarcas budistas.
Sin embargo, el Buda les indicó claramente a sus discípulos en varias
ocasiones que, después de su muerte, el Darma mismo les serviría como su
maestro. Él deseaba que su comunidad continuara en el modelo del sistema
parlamentario de Vajji. No pretendía para ellos que se organizaran en un modelo
como el de los reinos de Kosala y Magadha, con un solo monje como jefe.
No obstante después de
la muerte del Buda, parece haber habido una lucha por el poder entre Mahkassapa
y Ananda, una lucha entre el sistema tradicional indio de transmisión de la
autoridad autocrática del gurú al discípulo, y un sistema más igualitario y
democrático de los monjes mendicantes que vivían en pequeñas comunidades y seguían
un conjunto común de prácticas y principios.
Después de que el Buda
fue incinerado y se distribuyeron sus reliquias, los monjes aceptaron la
propuesta de Mahakassapa de celebrar un concilio en Rajagaha en la próxima
temporada de lluvias, para contar, confirmar y codificar las enseñanzas del
Buda. Mahakassapa elegiría a los ancianos que podían asistir.
Eligió solamente arjats
(6), aquellos que han alcanzado la liberación, los mismos que sumaron 499.
Inicialmente, Mahakassapa no incluyó a Ananda, porque no había obtenido
el estado de arjat. Mahakassapa lo excluyó a pesar de ser el que mejor conocía
de memoria los discursos del Buda y era un firme partidario y ruidoso defensor
de los deseos del Buda de no tener un líder único.
Tal vez otro factor
involucrado en la aversión de Mahakassapa hacia Ananda fue el hecho de que
Ananda fue quien convenció al Buda de ordenar a las mujeres. Esto pudo haber
ofendido los antecedentes de brahmán conservador de Mahakassapa.
Sin embargo, los
ancianos monásticos protestaron por la exclusión de Ananda, por lo que
Mahakassapa debió ceder y le permitió a Ananda asistir. De acuerdo con la
tradición teravada, Ananda obtuvo el estado de arjat la noche anterior al
concilio.
Mientras esperaba el
inicio de la reunión del concilio, Ananda se reunió con el primer ministro del
rey Ajatasattu, Vassakara (dByar-gyi rnam-pa, sánscrito. Varshakara). Ananda se
enteró de que, además del ataque que estaba preparando el ejército de Magadha
sobre Vajji, ellos estaban preparándose para un posible ataque del rey Pajjota
( Rab-gsal, sánscrito. Pradyota) del reino Avanti (A-banti’i yul, sánscrito.
Avanti) al oeste de Magadha.
Aunque el Buda no tenía
la intención de que hubiera un linaje de patriarcas al frente de su comunidad,
el hecho de que Mahakassapa tomara el liderazgo, indudablemente contribuyó a la
supervivencia de las enseñanzas del Buda y de la comunidad monástica a través
de esos difíciles e inciertos tiempos.
Quinientos arjats
asistieron a este primer concilio budista, celebrado en Sattipanniguha (Lo-ma
bdun-pa’i phug, sánscrito. Saptaparnaguha), la cueva de las siete hojas, cerca
de Rajagaha. Mahakassapa lo presidió, Ananda recitando de memoria la mayoría de
los sutras y Upali (Nye-bar ‘khor, sánscrito. Upali) también recitó las reglas
vinaya de la disciplina monástica. De acuerdo con la versión teravada de este
concilio, el Abidharma (chos mngon-pa, sánscrito. Abhidharma), las enseñanzas
sobre temas especiales de conocimiento, no fueron recitadas.
En la tradición
sarvastivada, la versión vaibáshika relata que Mahakassapa recitó algunas, pero
no todas las enseñanzas del Abidharma. Pero de acuerdo con la tradición
sautrántica, estas enseñanzas del Abidharma no eran realmente las palabras del
Buda, sino que fueron compuestas por siete de los arjats.
Resumiendo, la literatura pali de los
teravadas revela al Buda como un líder espiritual carismático, que luchó por
establecer y mantener su siempre creciente comunidad de discípulos y seguidores
en circunstancias extremadamente difíciles. Tuvo que enfrentar intrigas
políticas, varias guerras, la masacre de la gente de su tierra natal, una
denuncia personal ante un gobierno, el desafío de su liderazgo entre sus
discípulos, la muerte de uno de sus discípulos más cercanos y, al final, la
muerte por envenenamiento. Sin embargo,
durante todas estas duras pruebas, el Buda mantuvo la paz mental.
A lo largo de los cuarenta y seis
años durante los cuales enseñó después de lograr la iluminación, se mantuvo
firme en su compromiso de mostrar al mundo el camino de la liberación y la
iluminación (7).
NOTAS:
Don-grub: Siddhartha en sánscrito.
Gotama: Gau-ta-ma, en sánscrito. Gautama. Nombre utilizado para
referirse al Buda del primer día de la Ley. Nombre del clan al que pertenecía.
Buddha: En sánscrito. Buda es el nombre genérico que se le da a
todo Ser “iluminado” o “que despierta”, entendiendo que ha despertado del sueño
de la ignorancia dando fin al ciclo de las existencias samsáricas, alcanzando
con ello, la total liberación o nirvana
(sánscrito)
NOTAS DEL TEXTO:
(1) Canon Pali, colección de los antiguos textos budistas
escritos en idioma Pali, que constituyen el cuerpo doctrinal y fundacional del
budismo Theravāda. El Canon Pali se conoce como Tipitaka, o "Tres Cestos",
porque los manuscritos que contenía, inscritos sobre hojas secas de palmera, se
guardaban en tres cestos diferentes. La totalidad de los escritos del Tipitaka,
solamente en la traducción inglesa que no es completa, ocupa unas 12.000
páginas distribuidas en 40 volúmenes.
(2) Theravāda es una de las 19 escuelas nikaya que formaron el
budismo original. Se desarrollaron en la India durante los siglos subsecuentes
a la muerte de Buda (420-368 a.
C.).
(3) El budismo posee su propio calendario que es de tipo lunar, y
el cual se inicia en el 543 AEC. Los meses lunares comienzan al inicio de cada
luna llena. Cada mes tiene un número determinado de días y en total el año
tiene 354 días.
(4) Territorio gobernado por un sátrapa. Los sátrapas eran
elegidos directamente por el rey, generalmente entre miembros de la nobleza.
Ejercían el poder judicial y administrativo, cobraban los impuestos, se
encargaban del orden público y de reclutar y mantener el ejército.
(5) Sistema filosófico basado en que la única fuente de los
conocimientos son las sensaciones exteriores.
(6) En el budismo, arhat es alguien que ha ganado el
entendimiento profundo sobre la verdadera naturaleza de la existencia, que ha
alcanzado el nirvana y en consecuencia, no volverá a nacer de nuevo.
El budismo Theravāda considera el convertirse en arhat como la
meta del progreso espiritual. Sostiene que se debe pasar por tres estados
prematuros antes de reencarnar en un cielo como arhat.
El budismo Mahāyāna critica a esta meta de convertirse en arhat
como algo egoísta y considera al Bodhisattva de ser un objetivo más alto porque
los Bodhisattvas se quedan en el ciclo de renacimientos para trabajar por el
bien de otros.
Esta divergencia de opinión es una de las diferencias
fundamentales entre el Theravāda y el Mahāyāna.
(7) Una de las enseñanzas fundamentales de Buda es conocida como
las Tres Características de la Existencia. Explica cómo es la naturaleza del
mundo percibido y de todos los fenómenos del mismo. Ellas son:
1) La Impermanencia.
2) La Insustancialidad.
3) La Insatisfactoriedad.
La práctica budista considera que el factor último de liberación
del individuo no consiste en un mero conocimiento lógico o teórico de estas
tres realidades, sino en su comprensión y aceptación emocional interna
auténtica y plena, consecuente con la actitud y el comportamiento en la vida.
OBSERVACION:
El budismo Theravāda considera el convertirse en arhat como la
meta del progreso espiritual. Sostiene que un prospecto debe pasar por tres
estados prematuros antes de reencarnar en un cielo como arhat. El budismo
Mahāyāna critica a esta meta de convertirse en arhat como algo egoísta y
considera al Bodhisattva de ser un objetivo más alto porque los bodisatvas se
quedan en el ciclo de renacimientos para trabajar por el bien de otros. Esta
divergencia de opinión es una de las diferencias fundamentales entre el
Theravāda y el Mahāyāna.