¿QUÉ ES LA FE? LA FE ABARCA LA VERDAD, EL CORAJE, LA SABIDURÍA Y LA BUENA FORTUNA. INCLUYE LA COMPASIÓN Y LA HUMANIDAD, ASÍ COMO LA PAZ, LA CULTURA Y LA FELICIDAD. LA FE ES ESPERANZA ETERNA; ES EL SECRETO PARA EL AUTO-DESARROLLO SIN LÍMITES. LA FE ES EL PRINCIPIO BÁSICO DE CRECIMIENTO. (LAS DISCUSIONES SOBRE LA JUVENTUD, VOLUMEN 2, PÁGINAS 163/64).

¿QUÉ ES EL BUDISMO? ES EL NOMBRE DADO A LAS ENSEÑANZAS DE UN BUDA. "BUDA" SIGNIFICA "EL ILUMINADO”; ALGUIEN QUE PERCIBE LA ESENCIA O REALIDAD DE LA VIDA EN SU INTERIOR, ES UN SER ILUMINADO A LA VERDAD DE LA VIDA Y DEL UNIVERSO. A DIFERENCIA DE OTRAS RELIGIONES, EL BUDISMO NO ALEGA UNA REVELACIÓN DIVINA. COMIENZA CON UN HOMBRE, QUE A TRAVÉS DE SUS PROPIOS ESFUERZOS Y PERSEVERANCIA, DESCUBRIÓ LA REALIDAD DENTRO DE SÍ Y ENSEÑÓ QUE TODOS PODÍAN HACER LO MISMO. EL BUDA NO PUEDE SER DEFINIDO, COMO UN SER TRASCENDENTAL O SUPREMO. EN ESTE SENTIDO, EL BUDISMO, NO SOLO ES LA ENSEÑANZA DE UN BUDA, SINO LA ENSEÑANZA QUE POSIBILITA A TODAS LAS PERSONAS REVELAR SU NATURALEZA DE BUDA. EL BUDISMO ES UN SISTEMA PRÁCTICO DE ENSEÑANZA QUE NOS PERMITE CONCRETAR EL ESTADO IDEAL DE LA BUDEIDAD… LA PROPIA PERFECCIÓN.

¿QUE ES EL KOSEN-RUFU? “ES LA LUCHA PARA TRANSFORMAR LA VIDA DE LOS SERES HUMANOS, REVIRTIENDO LA OSCURIDAD QUE RESIDE EN EL INTERIOR DE SU VIDA, HACIENDOLO TOMAR CONCIENCIA DE SU NATURALEZA DE BUDA INHERENTE". LA ESENCIA DE “ESTABLECER LA ENSEÑANZA CORRECTA PARA ASEGURAR LA PAZ EN LA TIERRA” ESCRITO POR NICHIREN DAISHONIN, RADICA EN CONSTRUIR UNA RED DE PERSONAS DEDICADAS AL BIEN. PERO COMO ESTA CONTIENDA IMPLICA TRANSFORMAR DE RAÍZ LA VIDA DE LAS PERSONAS PROVOCARA RESISTENCIA EN CIERTOS SECTORES… ESTA GRAN BATALLA ES LA CLAVE PARA CREAR UN MUNDO DE PAZ Y DE FELICIDAD VERDADERAS, UNA TIERRA DE BUDAS.

YIGUIO Y KETA. PRÁCTICA PARA UNO MISMO Y PRÁCTICA PARA LOS DEMÁS. ESTOS ASPECTOS DEL BUDISMO VERDADERO SON: YIGUIO (PRÁCTICA PARA UNO MISMO) Y KETA (PRÁCTICA POR EL BIEN DE OTROS). AMBOS CONSTITUYEN UNA PRÁCTICA COMPLETA. SON COMO DOS RUEDAS QUE FUNCIONAN AL UNÍSONO PARA ADELANTAR NUESTRAS VIDAS, PARA MANIFESTAR NUESTRA ILUMINACIÓN INHERENTE.

¿QUE ES LA SOKA GAKKAI INTERNACIONAL (SGI)?...ES UNA ORGANIZACIÓN BASADA EN EL BUDISMO DE NICHIREN DAISHONIN, INSPIRADA EN EL RESPETO A LA VIDA, LA CONCIENCIA DE LOS DERECHOS HUMANOS, BUSCANDO DESPERTAR EN LAS PERSONAS EL ESPÍRITU DE RECONOCER, RESPETAR Y APRECIAR LAS SEMEJANZAS Y LAS DIFERENCIAS, PERMITIENDOLES FORTALECERSE Y TRANSFORMAR SU INTERIOR PARA DESARROLLAR SU MÁXIMO POTENCIAL, ASUMIENDO LA RESPONSABILIDAD DE SU PROPIA VIDA Y COMPROMETIENDOSE CON LA SOCIEDAD, EMPRENDER ACTIVIDADES EN SU VIDA COTIDIANA, PARA DESPLEGAR LA CAPACIDAD DE VIVIR CON CONFIANZA, CREANDO VALOR EN CUALQUIER CIRCUNSTANCIA Y CONTRIBUYENDO AL BIENESTAR DE AMIGOS, FAMILIARES Y SU COMUNIDAD…

…UNA DE LAS DIFICULTADES QUE LOS LATINOS TIENEN PARA COMPRENDER EL BUDISMO, radica en lo que el término "religión" significa en su ámbito social… Las religiones occidentales tienen sistemas jerárquicos en los que las reglas y los dogmas se establecen desde arriba hacia abajo… Ellas están basadas en la creencia de una deidad sobrenatural… La relación entre el maestro y el discípulo es interpretada como la de una persona que ciegamente, sigue a otra… VER MAS…

EL ESFUERZO DE NO RENDIRSE JAMAS. Vivimos una vida fragmentada y llena de conflictos. Estamos divididos en centenas de grupos de seres humanos, limitados por el miedo, la vergüenza, la culpa, la ira, las obsesiones y las emociones… esta lucha interna hace que no nos podamos entender… ¿Por que pasa esto...? VER MAS…

LA RECITACION DE LOS CAPITULOS “MEDIOS HABILES” Y “DURACION DE LA VIDA”. Carta a la esposa de Hiki Daigaku Saburo Yoshimoto. Este Ghoso, nos acerca a un precepto conocido como “seguir las costumbres de la región”. El significa que, mientras no esté en juego ninguna trasgresión grave, no se debe ir contra las tradiciones y costumbres de un país, región o comunidad, aunque debamos apartarnos ligeramente de las enseñanzas. Este criterio fue establecido por el Buda... VER MAS…

LAS REUNIONES DE DIALOGO O ZADANKAI, SON UN OASIS…En la actualidad, el egoísmo desmedido, provoca profundos trastornos en el corazón humano y estamos perdiendo la coexistencia con la naturaleza; por ello estos mini cónclaves de miembros de todas las edades, razas, intereses y antecedentes, son un foro de intercambio rico y refrescante. En un mundo afectado por la "DESERTIFICACION SOCIAL", estas reuniones son un oasis, en el que los seres humanos en forma individual, se esfuerzan en concretar la paz mundial y la prosperidad de la sociedad humana. ...Como budistas, al establecer una condición de paz interior en la vida cotidiana, contribuimos con la paz del mundo, posibilitando a cada uno, desarrollar su potencial inherente... VER MAS…

6. LAS CUATRO DEUDAS DE GRATITUD. ENVIADA A KUDO SAKON-NO-JO. (Los escritos de Nichiren Daishonin, Soka Gakkai, Paginas 43 /49).



   Con respecto a mi actual exilio,(1) hay dos cuestiones importantes que debo mencionar. Una es que ciento una inmensa alegría. Y la razón es que esta tierra se denomina “mundo saha”, y saha significa “resistir”. Por eso. Al Buda también se lo llama "El que puede resistir". En el mundo saha (2), hay mil millones de Montes Sumeru, mil millones de soles y lunas, y mil millones de grupos de cuatro continentes. Entre todos esos mundos, fue en el del centro - con su Monte Sumeru, su sol y su luna, y sus cuatro continentes – donde el Buda hizo su advenimiento. El Japón es una diminuta tierra de islas situadas en un lejano rincón de ese mundo, al noreste del país en el que el Buda nació.
   Ya que todos los mundos de las, excepto este mundo saha, son tierras puras, sus habitantes de buen corazón, no insultan ni odian a los sabios y venerables. En cambio, este mundo esta poblado de seres rechazados en las tierras puras de las diez direcciones, por haber cometido las diez malas acciones o las cincos faltas capitales, por calumniar a los sabios y venerables, por haber tratado a sus padres sin el debido amor filial, o a los sacerdotes, sin el debido respeto. Por tales ofensas, estos hombres caen en los tres malos caminos y, solo después de haber morado allí durantes kalpas incontables,  finalmente acaban renaciendo en este mundo. Así y todo como aún no han eliminado los residuo de su mal karma creado en existencias anteriores, conservan la tendencia perpetrar las diez malas acciones o las cinco faltas capitales, a vilipendiar a los sabios y venerables, a tratar a sus padres sin devoción filial, y a ser irreverentes con los monjes.
   Por dichas razones, cuando Shakyamuni El Que Así Llega hizo su advenimiento a este mundo, algunos le ofrecieron alimentos mezclados con  veneno; otros trataron de herirlo con palos y espadas, con elefantes enloquecidos, con leones, toros furiosos o perros salvajes. Otros, a su vez, lo acusaron [falsamente] de haber violado mujeres, dijeron que era un hombre de baja calaña, y le endilgaron homicidios. Algunos, al cruzarse con el, se cubrían los ojos para no tener que verlo;   otros cerraban las puertas o trancaban las ventanas. Y hubo quienes informaron a los reyes y ministros que [Shakyamuni] propugnaba ideas erróneas y era proclive a hablar mal de personajes excelsos. Tales incidentes se describen en el “Sutras de la Gran Compilación”, en el “Sutra del Nirvana” y otras escrituras. El Buda era inocente de todas esas malas acciones,; pero este mundo adolece de una deficiencia peculiar: en el nacen personas dotadas de un mal karma, que lo pueblan en gran número. Además el Rey Demonio del Sexto Cielo conspira para impedir que los habitantes de este mundo lo abandonen y se marchen a otras tierras puras, y por eso se vale de la menor oportunidad  para ejecutar sus depravadas acciones.
   Todo parece indicar que el fin último de estas maquinaciones es impedir que el Buda exponga el “Sutra del Loto”. Porque este Rey Demonio, por naturaleza, se la gente crea el karma de los tres malos caminos y sufre cuando las personas crean el  karma de los tres buenos caminos (3). Sin embargo no es esto último lo que mas le aflige, sinó las personas que aspiran a los tres vehículos, quienes, en realidad lo abruman de dolor. Así y todo, no son estas personas que aspiran a los tres vehículos las que mas lo hacen sufrir, sinó quienes crean el Karma que les permite llegar a ser budas; por eso, aprovecha la menor oportunidad para impedir que estos avancen. Sabe que aquellos que escuchan una sola frase u oración del “Sutra del Loto” lograran la Budeidad. Terriblemente contrariado por esta perspectiva, concibe los planes más diversos y se dedica a reprimir y perseguir a los creyentes, con la intención de que abandonen la fe.
   Aunque la época en que vivió el Buda fue en verdad corrupta, las cinco impurezas recién habían comenzado a manifestarse; además el demonio se detenía, pasmado y sobrecogido ante los poderes del Buda. Pero incluso en esa época, cuando la codicia, el odio y la estupidez de la gente todavía no cundían desenfrenadamente, y tampoco proliferaban las ideas erróneas, un grupo de Brahmanes de la escuela Bastón de Bambú asesino al venerable Maudgalyayana, conocido por dominar como nadie los poderes transcendentales; y el Rey Ajatashatru, soltó una estampida de  elefantes enloquecidos para acabar con la vida de la única persona digna de honor en los tres mundos (4). Devadatta mató a la monja Utpalavarna, que había alcanzado el estado de arhat; y el honorable Kokalika echó a correr rumores maliciosos sobre Shariputra, conocido por ser el de mayor en sabiduría. ¡Cuánto empeoraron las cosas en este mundo, a medida que las cinco impurezas fueron extendiendose! Y ahora, en esta última época, serán aún mas terribles los celos y el odio hacia los que creen incluso mínimamente en el “Sutra del Loto”. Al respecto,  el “Sutra del Loto” dice: “Puesto que el odio y los celos hacia este sutra abundan incluso durante la vida del “Que Así Llega”, ¡cuanto peor será después de su muerte! (5). Cuando leí este pasaje por primera vez, no pensé que la situación llegaría a ser tan grave como allí se vaticina. Pero Ahora me impacta la precisión infalible de las palabras del Buda, en especial viendo mis circunstancias actuales.
   Yo, Nichiren, no observo los preceptos con mi cuerpo; mi corazón tampoco está exento de los tres venenos. No obstante, dado que creo en este sutra [del Loto], y permite que otros se relacionen con él, pensé que, la sociedad me trataría con mayor gentileza. Probablemente porque el mundo ha ingresado en la última época,  hoy hay quienes siguen incluso a monjes casados y con hijos, y a sacerdotes que comen aves y pescado. Yo no tengo ni esposa ni hijos, ni tampoco como aves o pescado; he sido censurado sólo por propagar el “Sutra del Loto”. Aunque no poseo  hijos ni mujer, todo el país cree que soy un monje que transgrede el código de conducta, y aunque jamás di muerte a una sola hormiga o langosta, mi mala reputación se ha diseminado por toda la nación. Esto tiene mucho en común con la situación del Buda Shakyamuni, calumniado en vida por una muchedumbre de personas no Budistas.
   Al parecer, tan solo porque mi fe en el “Sutra del Loto” concuerda con sus enseñanzas un poco mas que la del resto de la gente, los demonios malignos se valen del cuerpo de los demás y hace que estos me odien. Soy solo un monje sin preceptos, humilde e ignorante. Pero cuando pienso que el “Sutra del Loto” – expuesto hace mas de dos mil años – menciona a alguien como yo, y que, y que según profetiza el Buda, esa persona tendrá que enfrentar persecuciones, no encuentro palabras con que expresar mi alegría.
   Ya han transcurrido veinticuatro o veinticinco años desde que comencé a estudia Budismo. Sin embargo, sólo en los últimos seis o siete años, creí en el “Sutra del Loto”. Además, aunque tenía fe en este sutra, debido a mi negligencia, a mis estudios o a las interrupciones de los asuntos mundanos, diariamente recitaba apenas un solo rollo, un solo capitulo o el titulo. Pero ahora, en los últimos doscientos cuarenta días - desde el duodécimo día del quinto mes del pasado, hasta el decimosexto día del primer mes de este año – creo que he practicado el “Sutra del Loto” las veinticuatro horas, de día y de noche. Y lo digo porque, habiendo sufrido el exilio por causa del “Sutra del Loto”, ahora lo leo y lo practico en forma continua, mientras camino o cuando estoy de pie, sentado o recostado. Para cualquiera que haya nacido como ser humano, ¿podría haber acaso una dicha mas grande?
   Es habitual que las personas comunes apenas se esfuercen una o dos horas por día -  y esto solo cuando se acuerdan de hacerlo -, aún cuando ellas mismas se incentivan para albergar el deseo de la iluminación y el anhelo de la felicidad en su próxima existencia. En lo que a mí concierne, leo el Sutra del Loto sin que haya que recordármelo, y lo práctico incluso mientras no leo sus palabras en voz alta.
   Durante el transcurso de incontables kalpas, mientras transmigré por los seis caminos y las cuatro formas de nacer, es posible que a veces haya participado en alzamientos, que haya robado, que haya irrumpido en viviendas ajenas durante la noche y que, a causa de tales delitos, el gobernante me haya sentenciado y condenado al exilio o la muerte. Pero esta vez, personas de mal karma han prestado cargos fraguados contra mi tan solo por mi firme determinación a propagar el “Sutra del Loto”; he aquí la causa de mi exilio. Seguramente, esto obrará en mi favor en futuras existencias. En esta última época, no puede haber nadie más que este practicando el “Sutra del loto” las veinticuatro horas, de día y de noche, sin tener que hacer un esfuerzo deliberado para ello.
   Hay otra cosa que despierta mi profundo agradecimiento. Es posible que, durante incontables palpas transmigrando por los seis caminos, haya conocido a numerosos soberanos y haya llegado a ser su regente o ministro favorito. En tal caso, puede ser que me hayan concedidos feudos, tesoros y remuneraciones. Sin embargo, ni una sola vez conocí a un soberano en cuyo país se hubiera propagado el “Sutra del Loto”, donde pudiese yo escuchar su nombre, practicarlo y, debido a esta causa, ser calumniado por otros o incluso desterrado por las autoridades. El “Sutra del Loto” dice: “Con respecto a este “Sutra del Loto”, a través de tierras incontables, uno no puede oír su nombre siquiera y mucho menos verlo, aceptarlo, creer en el, leerlo y recitarlo.” (6) Así pues, las personas que me calumniaron y el gobernante [que me exilio] son las personas a quienes les debo mi más profunda gratitud.
   El mismo que estudia las enseñanzas del Budismo no debe dejar de saldar las cuatro deudas de gratitud. De acuerdo con el “Sutra sobre la Contemplación de la Mente como terreno”, la primera de las cuatro deudas de gratitud es la que uno tiene con todos los seres vivos. De no ser por ellos, a uno le sería imposible sostener el juramento de salvar a innumerables seres vivientes. Además ¿Cómo podrían los bodhisattvas, incrementar su mérito si no hubiera malas personas que los persiguiesen?
   La Segunda de las cuatro deudas de gratitud es la que uno tiene con su padre y su madre. Sin progenitores, nadie podría nacer en los seis caminos. Si uno nace en la familia de un asesino, un ladrón, un transgresor de las normas de conducta o alguien que actúa contra la Ley, aunque uno mismo no cometa esas faltas, en cierta manera genera el mismo karma que quienes si lo hacen. Sin embargo en lo que concierne a mis padres en esta existencia, ellos no solo me dieron la vida, sinó que además, me condujeron a practicar el “Sutra del Loto”. Por eso la deuda de gratitud que tengo con ellos es mucho mas grande que si hubiera nacido en la familia de Brahma, de Shakra, de uno de los cuatro reyes celestiales, o un rey que hace girar la rueda, y por tal motivo hubiese heredado los tres mundos en los  cuatro continentes, para que me veneraran las cuatro clases de creyentes en los mundos de los seres humanos y celestiales.
   La tercera es la deuda que uno tiene con el soberano. Gracias a el, uno puede calentar su cuerpo bajo las tres clases de luz celestial (7) y mantener su vida con las cinco clases de granos (8) que crecen en la tierra. Por añadidura, en esta existencia he abrazado la fe en el “Sutra del Loto” y he encontrado un gobernante que me permitirá liberarme en esta vida de los sufrimientos del nacimiento y la muerte. Así pues, ¿cómo podría vivir recordando el daño insignificante que el me a causado y pasar por alto lo mucho que le debo?
   La cuarta es la deuda de gratitud con los tres tesoros. Cuando Shakyamuni El Que Así Llega se dedicó a la práctica de Bodhisattva durante incontables kalpas, acumuló toda la buena fortuna y las virtudes obtenidas por ese medio, y las dividió en sesenta y cuatro partes, con sus respectivos meritos. De las sesenta y cuatro, él reservo una sola para si mismo y dejó en este mundo las sesenta y tres restantes, con el siguiente juramento: “Habrá una época en que cundirán las cinco impurezas, florecerán las enseñanzas erróneas, y los difamadores poblarán la tierra. En ese momento, como las innumerables deidades benevolentes y guardianas ya no podrán deleitarse con el sabor de la Ley, su majestad y fortaleza irán menguando. El sol y luna perderán su fulgor, los dragones celestiales ya no provocarán mas  lluvias, y las deidades terrenales harán decrecer la fertilidad de los suelos. Las raíces y tallos, ramas y hojas, flores y frutos perderán sus propiedades medicinales y sus siete sabores. (9) Y hasta aquellos que llegaron al trono por haber observado en existencias anteriores los diez buenos preceptos se entregarán a la codicia, el odio y  la estupidez. Los seres humanos ya no brindarán a sus padres el debido amor filial, y la discordia reinará entre las seis clases de parientes (10). En un momento así, mis discípulos serán personas sin erudición y sin preceptos. Por esta razón, aunque lleven la cabeza rapada, serán abandonados por las deidades tutelares y se verán privados de todos los medios de subsistencia. Para mantener a esos monjes y monjas [ahora dejo aquí estas tres partes]”.
   Por otro lado, con respecto a los beneficios que el Buda habia adquirido como resultado de sus prácticas, los dividió en tres partes, de las cuales solo utilizó dos. Así pues, aunque podría haber vivido en este mundo ciento veinte años, falleció al cabo de ochenta y nos entregó a nosotros los cuarenta años restantes de la duración de su vida. (11)
   Aunque pudiésemos juntar toda el agua de los cuatro grandes océanos para humedecer en ellas piedras de tinta, aunque quemásemos todos los árboles y plantas para hacer barras de tinta, aunque recogiésemos las cerdas de todos los animales para fabricar pinceles, aunque utilizáramos como papel la superficie entera de todos los mundos de las diez direcciones y, con ello, escribiésemos palabras de agradecimientos, ni aún así podríamos saldar nuestra deuda con el Buda.
   Con respecto a la deuda de gratitud con la ley, esta es el maestro de todos los budas. Si los Budas son dignos de respeto, se debe a la Ley. Por ende, los que deseen saldar su deuda con el Buda deberán, primero, retribuir los favores recibidos de la Ley.
   Y con respecto a la deuda de gratitud con la Orden Budista, tanto el tesoro del Buda y como el tesoro de la Ley pueden perpetuarse., invariablemente, gracias a que existe una Orden. Para dar un ejemplo, sin leña no puede haber fuego, y sin tierra, no pueden crecer las plantas o los árboles. Del mismo modo, aunque existiera el Budismo, sin miembros de la Orden que lo estudiaran y lo difundieran, jamás podría haberse transmitido durante los dos mil años del Primer Día y del Día Medio de la Ley, y llegar hasta el Ultimo Día. En consecuencia, el Sutra de la Gran Compilación dice: “Si en él ultimo de los cinco periodos de quinientos años, alguien hostigara a los monjes sin erudición y sin preceptos, y los acusara de algún delito, esa persona estará extinguiendo la gran antorcha del Budismo". Por lo tanto, la inmensa deuda que uno tiene con la Orden es difícil de saldar.
   Por tal razón, es imperioso retribuir los favores recibidos de los tres tesoros. En tiempos antiguos, hubo venerables como el niño Montañas Nevadas, el Bodhisattva Lamento Perpetuo, el Bodhisattva Rey de la Medicina, y el Rey Brillo Universal, [que ofrendaron su vida para saldar dicha deuda]. El primero dio su cuerpo como alimento a un demonio; el segundo vendió su carne y medula. El tercero se quemó los brazos, y el cuarto se ofreció para que le cortaran la cabeza. Con todo, las personas comunes de esta última época, aunque reciben beneficios de los tres tesoros, se muestran reacias a retribuirlos. ¿Cómo piensan, entonces, acceder al Camino del  Buda? El Stra sobre la contemplación de la mente como terreno, el Sutra de la red de Brahma, y otras enseñanzas afirman que los que estudian el  budismo y reciben los preceptos de la iluminación perfecta e inmediata deben, sin falta, saldar las cuatro deudas de gratitud. Yo soy solo una persona común e ignorante, y mi cuerpo es de carne y sangre; no me he ni librado ni siquiera un poco, de las tres categorías de ilusiones. Y sin embargo, en bien del Sutra del Loto he sido difamado, calumniado, atacado con palos y espadas, y enviado al destierro. En vista de tales persecuciones, creo que se me podría comparar con los grandes venerables que quemaron los brazos, se aplastaron la médula o aceptaron ser  decapitados. A esto me refiero cuando hablo de mi inmensa alegría.
   La segunda de las dos cuestiones importantes es que siento un hondo pesar. El cuarto volumen del “Sutra del Loto” dice: “Si una mala persona, con el corazón vacio de bondad, apareciera durante el término de un kalpa en presencia del Buda y lo vilipendiara y lo maldijera sin cesar, la falta cometida por dicha persona sería relativamente leve. Pero si una persona dijese una única palabra malvada para difamar o maldecir la persona laica,  o al monje o monja que lee y recita el “Sutra del Loto”, en tal caso su falta sería muy graves.” (12) Cuando leo este y otros pasajes, mi convicción se enciende, el sudor irrumpe baña mi cuerpo y un torrente de lágrimas brota de mis ojos. Me duele que, por haber nacido yo en este país, tantas personas de esta tierra hayan creado, el peor de todos los karmas más posibles. Los que golpearon y azotaron Bodhisattva Jamás Despreciar pudieron arrepentirse mientras aún vivían; así y todo, sus faltas fueron de erradicar, que cayeron en el infierno Avichi y tuvieron que permanecer allí durante mil kalpas. Pero los que me hicieron daño a mi, todavía no han mostrado asomo de arrepentimiento.
   El Sutra de la gran compilación, al describir la retribución karmica que deben recibir dichas personas, dice: “[El Buda pregunto:] “Si una persona derrama sangre del cuerpo de mil, diez mil o un millón de Budas, ¿Qué pensaríais vosotros? ¿Qué ha cometido una grave falta o no?”.
   El Gran Rey Brahma respondió: “Si una persona derrama sangre de un solo Buda, su falta sería tan seria que lo llevaría a caer en el infierno del sufrimientos incesante. Su ofensa seria insondablemente grave, y debería permanecer en el gran infierno Avichi durante tantos kalpas, que un ábaco no serviría para calcular tamaña medida. Peor sería la falta de alguien que hiciera sangrar a diez mil o un millón de Budas. Nadie podría explicar cabalmente la falta de esa persona ni tampoco su retribución. Nadie, salvo el Que así Llega”. “Gran Rey Brahma – dijo el Buda -, supongamos que alguien, por mi bien, adoptase la tonsurara y el habito sacerdotal. Aunque no hubiese recibido nunca y, por ende, no observara ni uno solo de ellos, si alguien lo hostigara, lo insultara o lo golpease con un palo, la falta cometida por esa persona sería aún mas grave que aquella [de lastimar a mil o un millón de Budas]”.
   Nichiren
   En el decimosexto día del primer mes en el segundo año de Kocho (1262), signo cíclico mizunoe-inu
   A Kudo Sakon-no-jo

   ANTECEDENTES
   Nichiren Daishonin escribió esta carta mientras se hallaba exiliado en Ito península de Izu, y se la dirigió a Kudo Sakon-no-jo Yoshitaka, también conocido como Kudo Yoshitaka, Señor de  Amatsu en la provincia de Awa.
   Se dice que Kudo Yoshitaka adoptó la enseñanza de Nichiren Daishonin alrededor de 1256, aproximadamente en la misma época de Shijo Kingo y que Ikegami Munenaka, y cuando hacía pocos años que el Daishonin había comenzado a propagarla. Durante el destierro de su maestro en Izu, Yoshitaka le envió ofrendas y siguió siempre la fe con pureza. Murió encorbate, defendiendo al Daishonin de un atentado conocido como la persecución de Komatsubara, en el undécimo mes de 1264. "Las cuatro deudas de gratitud" es la única carta del Daishonin dirigida Yoshitaka que se ha conservado hasta hoy.
   En el texto, considerando el motivo de su exilio, Nichiren Daishonin expresa su convicción de ser un verdadero practicante del “Sutra del Loto”. Menciona “dos cuestiones importantes” referidas a su exilio en Izu. “Una es que siento una inmensa alegría,” afirma, y procede a explicar la razón de su júbilo. La mayor parte de la carta se ocupa de este punto. A continuación señala: “La Segunda de las dos cuestiones importantes es que siento un hondo pesar”. Cita pasajes del “Sutra del Loto” y del “Sutra de la gran compilación” que revelan la grave falta de actuar contra la Ley y contra sus devotos, y explica que lo acongoja pensar en la gran retribución karmica que tendrán que sobrellevar sus perseguidores. Esta es la parte final de la carta.
   A lo largo del texto, el Daishonin menciona dos razones de su  “inmensa alegría”. Una: haber demostrado que es el devoto del “Sutra del Loto”, en la medida en que fue cumpliendo las predicciones del Sutra  referidas a las persecuciones que habría de enfrentar su devoto en el “Ultimo Día de la Ley”. La otra es que soportar un destierro por causa del Sutra, le permite saldar las cuatro deudas de gratitud. Declara que el gobernante que lo condeno al exilio, es la persona a la cual el mas le debe; gracias a el, ha podido vivir las palabras del “Sutra del Loto” y demostrar que es su verdadero devoto.
   A continuación recalca la importancia de saldar las cuatro deudas de gratitud enunciadas en el “Sutra sobre la contemplación de la mente como terreno”. Estas indican el agradecimiento que se debe a todos los seres vivos, a los padres, al soberano, y a los tres tesoros: “el Buda, la Ley y la Orden Budista”.
   El Daishonin considera que lo más importante es saldar la deuda de gratitud con los tres tesoros, pues de otro modo uno no podría lograr la Budeidad.

NOTAS
1. Referencia al exilio del Daishonin a Ito, península de Izu, desde el duodécimo  día del quinto mes, 1261 hasta el vigésimo segundo día del segundo mes, 1263.
2. Aquí la expresión “mundo saha ” indica el gran sistema planetario que rodea nuestro mundo.
3. Los “tres buenos caminos” son los de los asuras, los seres humanos, y los seres celestiales, en contraste con los “tres malos caminos”: el infierno, el estado de las entidades hambrientas y la animalidad.
4. la historia de Ajatashatru se cuenta entre las nueve grandes persecuciones  sufridas por Shakyamuni.
5. Sutra del Loto, Cáp. 10.
6. Ibíd., Cáp. 14.
7. La luz del sol, la luna y las estrellas.
8. Trigo, arroz, frijoles y dos tipos de mijo. También, termino genérico que se aplica  a todos los granos.
9. Dulce, picante, agrio, amargo, salado, astringente, y sabores sutiles.
10. Las seis clases de parientes se refieren al padre, la madre, el hermano mayor, el hermano menor, la esposa y los hijos. Otra clasificación toma en cuenta al  padre, los hijos, el hermano mayor, el hermano menor, el esposo y la esposa.
11. No se ha podido rastrear el origen de esta afirmación; presuntamente, se basa en un pasaje del “Sutra de la Gran Compilación”.
12. Sutra del Loto, Cáp. 10.