CULTIVAR LA CONFIANZA. Por Ted Morino Vicedirector general SGI-USA
«Sufra lo que tenga que sufrir disfrute lo que tenga que disfrutar. Considere que tanto el sufrimiento y la alegría son parte de la vida y continúe invocando Nam-myoho-renge-kyo pase lo que pase. ¿Qué otra cosa puede ser esto que la ilimitada alegría de la Ley? Fortalezca su fe más que nunca.» (Los escritos de Nichiren Daishonin, pág. 681)
Ted Morino Vicedirector General, SGI-USA
En mis años mozos, mi tendencia era practicar el Budismo de Nichiren con un
enfoque idealista.Mi punto de vista cambió después de asistir a una reunión de la división de
estudiantes en Japón con el Presidente de la Soka Gakkai, Ikeda. Ante
decenas de miles de estudiantes, expresó su alegría de ver cuántos jóvenes
estaban luchando junto a él por la gran causa de la felicidad del hombre y
la paz mundial.
El presidente Ikeda también dijo que toda su buena fortuna provenía de la elección que había hecho de tener fe en el Gohonzon.
Escuchándolo pude percibir su corazón completamente abierto. Me dí cuenta de
que me hacía falta cultivar la misma confianza en la fe que demostraba el
presidente Ikeda y sentí la urgencia de practicar el Budismo de Nichiren
sinceramente junto al él.
Comencé a invocar Nam-myoho-renge-kyo con mayor intensidad y a aplicar este
pasaje a mi vida y mi práctica. Durante este proceso, me dí cuenta de que no
debía permitir que el sufrimiento me derrotara y que debía disfrutar del
proceso de abrir mi vida.
Comencé a tomar conciencia de que, mientras continúe en el camino de la fe y la práctica, estoy avanzando en dirección a mis sueños. También comprendí que debemos invocar Nam-myoho-renge-kyo con todo nuestro ser, ya sea que estemos sufriendo o que desbordemos de alegría.
A fuerza de participar en actividades de la fe y de alentar a los miembros
con continuidad, poco a poco mi vida comenzó a cambiar desde lo más
profundo.
Empecé a concentrarme más en mis problemas inmediatos en vez de en
el futuro o el pasado, y a dar todo de mí para lograr lo que tenía que
lograr en ese momento y a alentar a la persona que se encontraba frente a
mí.
Uno de los aspectos más importantes de mi revolución humana fue superar mi
timidez.
Con el tiempo, fui gradualmente cultivando la fuerza como para
hacerme valer y así crear valor ante cualquier situación.
Nichiren nos insta «continúe invocando Nam-myoho-renge-kyo pase lo que
pase». Hoy, veo la fe en el Budismo de Nichiren como una promesa de cumplir
con mi misión siempre invocando Nam-myoho-renge-kyo con espíritu de lucha,
pase lo que pase.
Vivir los escritos es una columna escrita por responsables nacionales y de
territorio de la SGI-USA, en donde aparece su pasaje predilecto de los
escritos de Nichiren Daishonin y narran cómo ese pasaje les cambió la vida.
Ted Morino Vicedirector General, SGI-USA
En mis años mozos, mi tendencia era practicar el Budismo de Nichiren con un
enfoque idealista.Mi punto de vista cambió después de asistir a una reunión de la división de
estudiantes en Japón con el Presidente de la Soka Gakkai, Ikeda. Ante
decenas de miles de estudiantes, expresó su alegría de ver cuántos jóvenes
estaban luchando junto a él por la gran causa de la felicidad del hombre y
la paz mundial.
El presidente Ikeda también dijo que toda su buena fortuna provenía de la elección que había hecho de tener fe en el Gohonzon.
Escuchándolo pude percibir su corazón completamente abierto. Me dí cuenta de
que me hacía falta cultivar la misma confianza en la fe que demostraba el
presidente Ikeda y sentí la urgencia de practicar el Budismo de Nichiren
sinceramente junto al él.
Comencé a invocar Nam-myoho-renge-kyo con mayor intensidad y a aplicar este
pasaje a mi vida y mi práctica. Durante este proceso, me dí cuenta de que no
debía permitir que el sufrimiento me derrotara y que debía disfrutar del
proceso de abrir mi vida.
Comencé a tomar conciencia de que, mientras continúe en el camino de la fe y la práctica, estoy avanzando en dirección a mis sueños. También comprendí que debemos invocar Nam-myoho-renge-kyo con todo nuestro ser, ya sea que estemos sufriendo o que desbordemos de alegría.
A fuerza de participar en actividades de la fe y de alentar a los miembros
con continuidad, poco a poco mi vida comenzó a cambiar desde lo más
profundo.
Empecé a concentrarme más en mis problemas inmediatos en vez de en
el futuro o el pasado, y a dar todo de mí para lograr lo que tenía que
lograr en ese momento y a alentar a la persona que se encontraba frente a
mí.
Uno de los aspectos más importantes de mi revolución humana fue superar mi
timidez.
Con el tiempo, fui gradualmente cultivando la fuerza como para
hacerme valer y así crear valor ante cualquier situación.
Nichiren nos insta «continúe invocando Nam-myoho-renge-kyo pase lo que
pase». Hoy, veo la fe en el Budismo de Nichiren como una promesa de cumplir
con mi misión siempre invocando Nam-myoho-renge-kyo con espíritu de lucha,
pase lo que pase.
Vivir los escritos es una columna escrita por responsables nacionales y de
territorio de la SGI-USA, en donde aparece su pasaje predilecto de los
escritos de Nichiren Daishonin y narran cómo ese pasaje les cambió la vida.