FRAGMENTO DEL MENSAJE DE AÑO NUEVO DEL PRESIDENTE DE LA SGI, DAISAKU IKEDA, PARA EL 2011
UNA HISTORIA DONDE BRILLEN LOS TRIUNFOS DE LA REVOLUCIÓN HUMANA.
UNA HISTORIA QUE NARRE EL DESARROLLO DINÁMICO DEL KOSEN-RUFU.
[...] Nichiren Daishonin escribe: “Cuando la deidad del Sol asciende por el Levante, proyecta sus rayos de luz, abre sus ojos celestiales y observa el mundo entero. Si [...] ve a un devoto del Sutra del loto, su corazón se regocija”.(1).
Las deidades celestiales sienten un profundo alborozo en todos los lugares donde nuestros miembros están entonando Nam-myoho-renge-kyo —la Ley primordial del universo— y poniendo en práctica la sabiduría contenida en las enseñanzas humanísticas del budismo de Nichiren Daishonin.
En todos esos lugares, también está creciendo y desplegándose el inspirador movimiento de paz y prosperidad que llamamos “kosen-rufu”.
En esta época cada vez más conflictiva en que vivimos, esforcémonos mucho más aún para que nuestra vida pueda vibrar con el poder transformador, revitalizador y armonizador de la Ley Mística.
[…] El Sutra del loto narra la aparición de los Bodhisattvas de la Tierra, que irrumpen desde lo profundo en “los miles de millones de tierras del mundo saha”3 en respuesta al llamado de Shakyamuni, su maestro. Estos bodhisattvas surgen en el lugar de su misión y llevan a cabo su lucha en la tierra con la cual mantienen una profunda relación kármica.
Exactamente de esta misma manera, los miembros de la SGI formamos una magnífica red de Bodhisattvas de la Tierra que envuelve este planeta azul, dedicados a promover la paz, la cultura y la educación.
Cada uno de nosotros voluntariamente ha elegido nacer en este atribulado mundo saha y representar la saga de su revolución humana. El guión de cada obra es distinto: algunos triunfan sobre la enfermedad, otros superan la adversidad económica, otros revierten sus problemas de relaciones humanas…
Pero, en todas ellas, sus protagonistas logran la victoria y convierten el veneno en medicina, para transmitir a los demás la grandeza de la Ley Mística y, en el proceso, infundir una enorme valentía y esperanza.
El Daishonin escribe, elogiando a los hermanos Ikegami que valientemente habían superado un gran obstáculo: “¿Acaso podría haber una historia más espléndida que la de ustedes?”.4
No hay karma negativo que no se pueda transformar mediante el poder de la fe en la Ley Mística.
Espero que cada uno de ustedes escriba su propia historia triunfal de revolución humana, una historia que siga relatándose a lo largo de interminables generaciones futuras.
La palabra “historia” también contiene el significado de “relato personal”. En este momento, estoy manteniendo un diálogo con el doctor Vincent Harding, un historiador estadounidense que fue, además, amigo personal del doctor Martin Luther King (h), el famoso líder del movimiento norteamericano por los derechos civiles.
Juntos, estamos analizando de qué manera el poder humano de crear la historia surge de nuestra capacidad de narrar, de contar relatos. El doctor Harding comentó:
Estos relatos o historias nos ayudan a entender la interrelación que tenemos unos con otros. Este pensamiento es lo que nos permite entender que todos somos parte de una totalidad, y que no existe entre las personas una separación real.
Esto significa que las divisiones y las separaciones son de naturaleza ilusoria. De tal forma, nuestras diversas historias ponen de relieve la conexión que existe entre los seres humanos.5
Las experiencias de fe que los miembros de la SGI relatan orgullosamente a los demás son el relato de personas que pudieron comprender su propia dignidad inherente y descubrir el infinito valor de su vida, a partir de activar en lo profundo de su ser el poder invencible de la Budeidad.
Estos inspiradores relatos nos permiten confirmar que, más allá de las diferencias superficiales de raza, etnia, idioma o cultura, todos somos seres humanos de infinita nobleza, que poseemos el potencial del estado de Buda. Son relatos que nos alientan y nos incentivan a redoblar nuestro esfuerzo personal.
[…] El 6 de enero de 1951, mi maestro Josei Toda me llamó pidiéndome que fuera hasta su casa. Ese día, en el contexto de una terrible situación financiera que estaba afrontando su empresa, me confió el futuro a mí, un joven de veintitrés años. Y me dijo: “Pase lo que pase, si tú y yo cumplimos nuestra misión en la vida, llegará sin falta el momento en que lograremos el
kosen-rufu, el deseo más entrañable del Daishonin. Por mucho que digan los demás, debes avanzar con firmeza y propósito claro en bien de la Soka Gakkai”.
Cuando los jóvenes discípulos se pongan en acción con la misma postura que su mentor, escribirán una historia impresionante; dejarán a su paso el legado de una profunda historia que no tendrá parangón en el mundo entero.
Como observó el filósofo británico Alfred North Whitehead: “La virtud primordial de la religión es la sinceridad”.7 Nada equivale o supera el valor de la sinceridad.
Para triunfar el año próximo, escribamos cada uno de nosotros una historia renovada donde se vea el triunfo de nuestra revolución humana y una nueva historia que muestre el desarrollo dinámico del kosen-rufu, mediante la oración contundente, el esfuerzo enfocado y la sólida unión.
Mi esposa y yo estamos orando con alma y vida por la salud y la longevidad de nuestros amados compañeros de fe y de sus familias, en ciento noventa y dos países y territorios del mundo.
Daisaku Ikeda
Presidente de la Soka Gakkai Internacional
1 The Writings of Nichiren Daishonin (WND), Tokio: Soka Gakkai, 2006, vol. 2, pág. 653.
3 The Lotus Sutra and Its Opening and Closing Sutras (El Sutra del loto, y los sutras de inicio y de cierre), cap. 15, pág. 252.
4 Los escritos de Nichiren Daishonin (END), Tokio: Soka Gakkai, 2008, pág. 523.
5 Diálogo publicado en la edición de marzo de 2010 de la revista Daisanbummei. Aún no traducido a otros idiomas.
7 WHITEHEAD, Alfred North: Religion in the Making (La construcción de la religión), Cambridge, Massachusetts:
Editorial de la Universidad de Harvard 1927, pág 5.
UNA HISTORIA QUE NARRE EL DESARROLLO DINÁMICO DEL KOSEN-RUFU.
[...] Nichiren Daishonin escribe: “Cuando la deidad del Sol asciende por el Levante, proyecta sus rayos de luz, abre sus ojos celestiales y observa el mundo entero. Si [...] ve a un devoto del Sutra del loto, su corazón se regocija”.(1).
Las deidades celestiales sienten un profundo alborozo en todos los lugares donde nuestros miembros están entonando Nam-myoho-renge-kyo —la Ley primordial del universo— y poniendo en práctica la sabiduría contenida en las enseñanzas humanísticas del budismo de Nichiren Daishonin.
En todos esos lugares, también está creciendo y desplegándose el inspirador movimiento de paz y prosperidad que llamamos “kosen-rufu”.
En esta época cada vez más conflictiva en que vivimos, esforcémonos mucho más aún para que nuestra vida pueda vibrar con el poder transformador, revitalizador y armonizador de la Ley Mística.
[…] El Sutra del loto narra la aparición de los Bodhisattvas de la Tierra, que irrumpen desde lo profundo en “los miles de millones de tierras del mundo saha”3 en respuesta al llamado de Shakyamuni, su maestro. Estos bodhisattvas surgen en el lugar de su misión y llevan a cabo su lucha en la tierra con la cual mantienen una profunda relación kármica.
Exactamente de esta misma manera, los miembros de la SGI formamos una magnífica red de Bodhisattvas de la Tierra que envuelve este planeta azul, dedicados a promover la paz, la cultura y la educación.
Cada uno de nosotros voluntariamente ha elegido nacer en este atribulado mundo saha y representar la saga de su revolución humana. El guión de cada obra es distinto: algunos triunfan sobre la enfermedad, otros superan la adversidad económica, otros revierten sus problemas de relaciones humanas…
Pero, en todas ellas, sus protagonistas logran la victoria y convierten el veneno en medicina, para transmitir a los demás la grandeza de la Ley Mística y, en el proceso, infundir una enorme valentía y esperanza.
El Daishonin escribe, elogiando a los hermanos Ikegami que valientemente habían superado un gran obstáculo: “¿Acaso podría haber una historia más espléndida que la de ustedes?”.4
No hay karma negativo que no se pueda transformar mediante el poder de la fe en la Ley Mística.
Espero que cada uno de ustedes escriba su propia historia triunfal de revolución humana, una historia que siga relatándose a lo largo de interminables generaciones futuras.
La palabra “historia” también contiene el significado de “relato personal”. En este momento, estoy manteniendo un diálogo con el doctor Vincent Harding, un historiador estadounidense que fue, además, amigo personal del doctor Martin Luther King (h), el famoso líder del movimiento norteamericano por los derechos civiles.
Juntos, estamos analizando de qué manera el poder humano de crear la historia surge de nuestra capacidad de narrar, de contar relatos. El doctor Harding comentó:
Estos relatos o historias nos ayudan a entender la interrelación que tenemos unos con otros. Este pensamiento es lo que nos permite entender que todos somos parte de una totalidad, y que no existe entre las personas una separación real.
Esto significa que las divisiones y las separaciones son de naturaleza ilusoria. De tal forma, nuestras diversas historias ponen de relieve la conexión que existe entre los seres humanos.5
Las experiencias de fe que los miembros de la SGI relatan orgullosamente a los demás son el relato de personas que pudieron comprender su propia dignidad inherente y descubrir el infinito valor de su vida, a partir de activar en lo profundo de su ser el poder invencible de la Budeidad.
Estos inspiradores relatos nos permiten confirmar que, más allá de las diferencias superficiales de raza, etnia, idioma o cultura, todos somos seres humanos de infinita nobleza, que poseemos el potencial del estado de Buda. Son relatos que nos alientan y nos incentivan a redoblar nuestro esfuerzo personal.
[…] El 6 de enero de 1951, mi maestro Josei Toda me llamó pidiéndome que fuera hasta su casa. Ese día, en el contexto de una terrible situación financiera que estaba afrontando su empresa, me confió el futuro a mí, un joven de veintitrés años. Y me dijo: “Pase lo que pase, si tú y yo cumplimos nuestra misión en la vida, llegará sin falta el momento en que lograremos el
kosen-rufu, el deseo más entrañable del Daishonin. Por mucho que digan los demás, debes avanzar con firmeza y propósito claro en bien de la Soka Gakkai”.
Cuando los jóvenes discípulos se pongan en acción con la misma postura que su mentor, escribirán una historia impresionante; dejarán a su paso el legado de una profunda historia que no tendrá parangón en el mundo entero.
Como observó el filósofo británico Alfred North Whitehead: “La virtud primordial de la religión es la sinceridad”.7 Nada equivale o supera el valor de la sinceridad.
Para triunfar el año próximo, escribamos cada uno de nosotros una historia renovada donde se vea el triunfo de nuestra revolución humana y una nueva historia que muestre el desarrollo dinámico del kosen-rufu, mediante la oración contundente, el esfuerzo enfocado y la sólida unión.
Mi esposa y yo estamos orando con alma y vida por la salud y la longevidad de nuestros amados compañeros de fe y de sus familias, en ciento noventa y dos países y territorios del mundo.
Daisaku Ikeda
Presidente de la Soka Gakkai Internacional
1 The Writings of Nichiren Daishonin (WND), Tokio: Soka Gakkai, 2006, vol. 2, pág. 653.
3 The Lotus Sutra and Its Opening and Closing Sutras (El Sutra del loto, y los sutras de inicio y de cierre), cap. 15, pág. 252.
4 Los escritos de Nichiren Daishonin (END), Tokio: Soka Gakkai, 2008, pág. 523.
5 Diálogo publicado en la edición de marzo de 2010 de la revista Daisanbummei. Aún no traducido a otros idiomas.
7 WHITEHEAD, Alfred North: Religion in the Making (La construcción de la religión), Cambridge, Massachusetts:
Editorial de la Universidad de Harvard 1927, pág 5.