CAMBIAR EL DESTINO. INTRODUCCION PARA NO BUDISTAS.
Con frecuencia nos dicen
que podemos cambiar nuestro karma practicando el Budismo de Nichiren Daishonin,
pero ¿qué quiere decir eso en realidad?
El Budismo de Nichiren
existe para aliviar el sufrimiento de la gente y ayudarlos a ser realmente
felices. Con ese fin, enseña la Ley de causa y efecto, que forma la base de la
doctrina del karma. Con nuestros actos creamos causas, buenas y malas, que se
graban en nuestra vida en forma de potencial que llamamos karma.
La palabra karma significa «acción». Nuestras buenas y malas
causas se manifestarán en forma de efectos positivos y negativos en el futuro.
Los acontecimientos o patrones, buenos y malos, que se manifiestan en esta vida
se consideran efectos de causas negativas o positivas hechas en vidas pasadas.
¿LOS SUFRIMIENTOS DEL
ESTADO DE INFIERNO DESAPARECERÁN EN UN INSTANTE?
Como los efectos
negativos generalmente atraen más atención, la palabra karma tiende a asociarse
con sufrimientos ineludibles o malos resultados. Si el karma es ineludible,
entonces ¿por qué hace falta aprender del karma?
La respuesta del Budismo
de Nichiren constituye un punto importante que la distingue de otras formas de
budismo. En general, la teoría de karma dice que la ley de causa y efecto se
basa en una especie de justicia de retribución, este concepto idealiza que las
personas no pueden ser feliz hasta tanto reciban, y de este modo elimine de su
vida, todos los efectos negativos del karma, que se han generado a partir de
causas negativas realizadas en el pasado.
Pero, como la vida es un
proceso eterno y continuo, y el karma negativo del pasado puede ser ilimitado,
sería inimaginable o casi imposible, expiar todos los efectos negativos
acumulados.
Además, según esta concepción, dado el inmenso escollo que supone
nuestro karma negativo, en la creación de suficientes buenas causas para lograr
la iluminación o Budeidad - o sea, para manifestar la felicidad absoluta -
tendríamos que hacer solamente buenas causas durante innumerables vidas.
Es por eso que muchas
enseñanzas budistas que no se basan en el Sutra del Loto hablan de que son
necesarios «interminables kalpas de práctica» para alcanzar la Budeidad.
Pero Nichiren Daishonin
enseñó que esta concepción del karma, si bien es exacta en un aspecto, no
esclarece el proceso para crear una vida verdaderamente feliz y un mundo de
paz. El escribió: «El que menosprecia a otro, a su vez será despreciado. El que
habla mal de alguien que tiene un bello aspecto físico, renacerá siendo feo […]
Esta es la ley general de causa y efecto». Y continúa: «Sin embargo, mis
sufrimientos no deben atribuirse a esta ley causal. En el pasado, yo desprecié
a los devotos del Sutra del loto. También me burlé del mismísimo Sutra — a
veces elogiándolo exageradamente y, a veces, con desdén» («Carta desde Sado»,
END, pág. 323).
Nichiren nos enseña que,
en contraste con la ley causal general, las causas y efectos más profundos
surgen de la relación con la Ley mística de Nam-myoho-renge-kyo, que funciona
en el núcleo de la vida misma. Nichiren identifica que la fuente de toda la
oposición y el sufrimiento que tiene que enfrentar a medida que propaga el
Sutra del Loto, Sutra que expone las funciones de la Ley mística, es su propia
incredulidad y desprecio por esta Ley en el pasado. Al enfrentarse con las
dificultades que provienen de este compromiso de propagar la Ley, él no
solamente está expiando su karma a nivel profundo, sino que está activando al
máximo el Estado de Buda dentro de su vida. El mismo proceso es válido para
todas las personas. También nos aclara que la fuente del karma negativo es la
oscuridad o ignorancia fundamental de la vida, que nos hace difícil reconocer
la función de la Ley mística dentro de nuestra propia vida y la vida de los
demás. Si reconocemos esta Ley y luchamos para actuar en armonía con ella,
podemos superar nuestra oscuridad fundamental, la raíz del sufrimiento Kármico.
Cuando lo hacemos, dice Nichiren: «los sufrimientos del infierno desaparecerán
en un instante» (END, pág. 208).
¿ENTONCES EL KARMA SE
DESVANECE EN UN INSTANTE CUANDO PRACTICAMOS EL BUDISMO DE NICHIREN DAISHONIN?
Claro que no. En
realidad, quiere decir que la importancia del karma negativo pierde el
producido con rapidez ante la sabiduría y la fuerza vital que llenan nuestra
vida cuando despertamos a nuestra naturaleza de Buda.
Como ejemplo, Nichiren
dice que “una vez que el sol sale, las estrellas en el cielo ya no se ven” («La
selección del tiempo», END, pág. 602). De manera similar, una vez que el sol de
la Ley mística sale en nuestro corazón, mientras profundizamos la fe con una
firme práctica del budismo, los problemas que surgen del karma se tornan
triviales e insignificantes en comparación con la Ley.
Nuestro karma negativo
del pasado ya no puede dictar la dirección de nuestra vida. En cierto sentido,
al activar una fuente mucho más profunda y poderosa de causas y efectos
cambiamos nuestro destino a nivel fundamental.
GRANDES OPORTUNIDADES
PARA FORJAR NUESTRA VIDA
Nadie está libre del
karma negativo, que inevitablemente aparece en forma de obstáculos y problemas.
Pero practicando el Budismo de Nichiren podemos enfrentar y transformarlos. Por
lo tanto, es importante que encaremos los problemas directamente mientras
entonamos Nam-myoho-renge-kyo con
una determinación firme, clara y convincente. Tratar de evitar o eludir los
problemas nos priva de la oportunidad de cambiar nuestro karma.
Nichiren escribe: «el
hierro se convierte en una magnífica espada cuando es sometido al fuego y a los
golpes» («Carta desde Sado», END, pág. 322) y «cuando el hierro es forjado, los
defectos del material afloran a la superficie» («Carta a los hermanos », END,
pág. 521). Una espada fuerte se hace golpeando un pedazo de hierro candente y
haciendo salir las impurezas del metal. Del mismo modo, encarando directamente
los obstáculos y superándolos podemos cultivar un yo inquebrantable y sólido.
Desde los primeros días
de la Soka Gakkai, los miembros han transformado su karma constantemente, en su
trabajo para transformar el destino de la humanidad mediante la propagación del
Budismo de Nichiren, es decir, el trabajo para lograr el kosen-rufu. Como
consecuencia, han desarrollado un estado de felicidad inquebrantable...
Nota: END: Abreviatura de “Los Escritos de Nichiren Daishonin”.